Sin duda alguna si recordamos a Thomas Gravesen recordamos el juego agresivo, intenso, con fuerza y con lucha; uno de esos jugadores que todos querríamos tener en nuestro equipo.
DATOS PERSONALES:
Thomas Gravesen nació un 11 de Marzo de 1976 en la localidad de Vejle, en Dinamarca. Fue un jugador de corte defensivo que jugaba en el dentro del campo. Fue uno de los estandartes de su selección de fútbol y una figura importantísima en el Everton, equipo en el que jugó durante 5 temporadas inicialmente, aunque más adelante volvería al club de Inglaterra. El 27 de Enero de 2009, anunciaba su retirada de manera oficial de los terrenos de juego a través de un comunicado y tras estar varios meses sin equipo.
TRAYECTORIA:
Gravasen comenzó su carrera futbolística en el equipo de su localidad natal, el Vejle BK. En el equipo danés permaneció durante 4 temporadas, desde 1990 hasta 1994, jugando un total de 58 partidos y sumando 10 goles en esos cuatro años. Después de jugar en Dinamarca decidió cambiar de aires y explorar mundo. En el año 1998 firmó su primer contrato con un gran equipo de Europa, el Hamburgo SV. En su paso por la Bundesliga, en la cual defendió la camiseta del Hamburgo durante dos temporadas, consiguió ser nombrado el mejor jugador extranjero. Después de esas dos magnificas temporadas varios equipos importantes de Europa pusieron sus ojos en él. Finalmente fue el Everton el equipo que consiguió hacerse con los servicios del jugador nacido en Dinamarca.
En el año 2000 fichó por el Everton, sin duda alguna su equipo y el equipo en el que se dio a conocer al mundo entero. Gravesen se consolidó en la posición de mediocentro defensivo. Era un jugador con mucho carácter, un jugador tipo Premier League: duro, fuerte, que no rehuía la lucha, muy físico y era de los que o pasaba el jugador o pasaba el balón, nunca los dos juntos. En el club inglés permaneció durante 5 temporadas, siendo uno de los jugadores más querido por la afición blue. Fue apodado como El Ogro por su carácter temperamental y su forma de vivir el fútbol. Parecía que siempre estaba cabreado. Era como un perro de presa, no soltaba a su presa hasta que, o bien hacía falta o bien se llevaba el balón. No es un secreto que técnicamente no era un iluminado y el trato con el balón no era su fuerte pero lo compensaba con esfuerzo y trabajo.
Al comienzo de la temporada 2005-2006, Thomas Gravesen fichó por el Real Madrid. El equipo blanco contaba con todas sus "Galácticos" como Beckham, Zidane, Figo, R.Carlos, Raúl, etc. El entrenador, Fabio Capello, le dio bastantes minutos y disputó bastantes partidos con la camiseta blanca (35). Todo el mundo sabía en el Real Madrid como era Gravesen, tanto jugadores como directivos, cuerpo técnico y aficionados. Sin duda alguna uno de los momentos de Gravesen en el Madrid fue ese rifirrafe que tuvo con Robinho mientras entraban en la concentración de la pretemporada del año 2006. Estaban en Irdning (Austria) y Robinho le lanzó un puñetazo y se lió la tangana. Fue una imagen muy triste ya que eso nunca debe ocurrir entre compañeros de un mismo equipo. Fabio Capello lo expulsó del entrenamiento y lo declaro transferible.
En verano de 2006 fichó por el Celtic escocés. No triunfó en su llegada a Escocia. Jugó pocos partidos y no tuvo ninguna importancia ni peso en el equipo de Glasgow. A la temporada siguiente volvería a enfundarse la camiseta del Everton en calidad de cedido. Esa temporada volvió a brillar y a retomar la forma que había perdido en el Celtic. Como el ave fénix resurgió de sus cenizas. Al año siguiente, cuando finalizó su cesión al Everton, volvió al Celtic. Unos meses después y tras no contar para nada en los planes del entrenador del equipo escotes, Thomas Gravesen se desvinculó del equipo. Meses después de dejar el club anunció su retirada en un comunicado ratificado por su representante. Durante todos los años en los que jugó al fútbol, solamente consiguió una Liga Inglesa.
ACTUALIDAD:
En la actualidad, Thomas Gravesen vive mejor que cuando jugaba al fútbol. Se ha trasladado a una ciudad del Estado de Nevada (EEUU). Se ha convertido en uno de los personajes de Las Vegas además de haber ganado un dineral jugando en los casinos. Le da igual el póker que la ruleta, para él lo importante es ganar dinero.
Esta es la leyenda de Thomas Gravesen, un jugador fuerte, bronco y con mucho carácter pero sobre todo un jugador único.
Publicado por: @Marcos_14_
En el año 2000 fichó por el Everton, sin duda alguna su equipo y el equipo en el que se dio a conocer al mundo entero. Gravesen se consolidó en la posición de mediocentro defensivo. Era un jugador con mucho carácter, un jugador tipo Premier League: duro, fuerte, que no rehuía la lucha, muy físico y era de los que o pasaba el jugador o pasaba el balón, nunca los dos juntos. En el club inglés permaneció durante 5 temporadas, siendo uno de los jugadores más querido por la afición blue. Fue apodado como El Ogro por su carácter temperamental y su forma de vivir el fútbol. Parecía que siempre estaba cabreado. Era como un perro de presa, no soltaba a su presa hasta que, o bien hacía falta o bien se llevaba el balón. No es un secreto que técnicamente no era un iluminado y el trato con el balón no era su fuerte pero lo compensaba con esfuerzo y trabajo.
Al comienzo de la temporada 2005-2006, Thomas Gravesen fichó por el Real Madrid. El equipo blanco contaba con todas sus "Galácticos" como Beckham, Zidane, Figo, R.Carlos, Raúl, etc. El entrenador, Fabio Capello, le dio bastantes minutos y disputó bastantes partidos con la camiseta blanca (35). Todo el mundo sabía en el Real Madrid como era Gravesen, tanto jugadores como directivos, cuerpo técnico y aficionados. Sin duda alguna uno de los momentos de Gravesen en el Madrid fue ese rifirrafe que tuvo con Robinho mientras entraban en la concentración de la pretemporada del año 2006. Estaban en Irdning (Austria) y Robinho le lanzó un puñetazo y se lió la tangana. Fue una imagen muy triste ya que eso nunca debe ocurrir entre compañeros de un mismo equipo. Fabio Capello lo expulsó del entrenamiento y lo declaro transferible.
En verano de 2006 fichó por el Celtic escocés. No triunfó en su llegada a Escocia. Jugó pocos partidos y no tuvo ninguna importancia ni peso en el equipo de Glasgow. A la temporada siguiente volvería a enfundarse la camiseta del Everton en calidad de cedido. Esa temporada volvió a brillar y a retomar la forma que había perdido en el Celtic. Como el ave fénix resurgió de sus cenizas. Al año siguiente, cuando finalizó su cesión al Everton, volvió al Celtic. Unos meses después y tras no contar para nada en los planes del entrenador del equipo escotes, Thomas Gravesen se desvinculó del equipo. Meses después de dejar el club anunció su retirada en un comunicado ratificado por su representante. Durante todos los años en los que jugó al fútbol, solamente consiguió una Liga Inglesa.
ACTUALIDAD:
En la actualidad, Thomas Gravesen vive mejor que cuando jugaba al fútbol. Se ha trasladado a una ciudad del Estado de Nevada (EEUU). Se ha convertido en uno de los personajes de Las Vegas además de haber ganado un dineral jugando en los casinos. Le da igual el póker que la ruleta, para él lo importante es ganar dinero.
Esta es la leyenda de Thomas Gravesen, un jugador fuerte, bronco y con mucho carácter pero sobre todo un jugador único.
Publicado por: @Marcos_14_
No hay comentarios:
Publicar un comentario