Ya son 100 partidos los que lleva Salah Mejri en el Real Madrid, lo que es su segunda temporada. A sus espaldas lleva más de 100 rebotes y tapones, pero últimamente no juega mucho con apenas una media de 9,3 minutos reservados para él.
El pívot tunecino combina su enorme envergadura con una agilidad notable para su altura. A ello le une una gran capacidad de intimidación, rebote y un potente juego por encima del aro.
Cuando Mejri llegó al Madrid confesó que había cumplido su sueño. Llegaba tras ser nombrado jugador revelación de la pasada temporada con el Blusens Monbus.
Ha sido muy importante para ganar títulos como La Liga Endesa, Copa del Rey y dos veces la Supercopa de España.
En la temporada 2013-14 jugó siete partidos como titular con 419 minutos jugados en total. En defensa logró un total de 30 tapones y 77 rebotes con solo 16 balones perdidos.
En esta temporada hasta el 4 de diciembre, solo había jugado siete partidos, todos ellos de Liga Endesa y con una media por duelo de 8,5 minutos, 4 puntos, 1,7 rebotes y 0,7 tapones (es el cuarto mejor en esta faceta de toda la Liga Endesa en la primera vuelta). Laso había asegurado numerosas veces que Salah tendría que centrarse en Liga, ya que en la Euroliga, Slaughter que no jugaba Liga, ocupaba su lugar.
Uno de sus peores partidos fue el que disputó frente al Guizpukoa Basket en el que jugó 12 minutos donde perdió seis balones e hizo cinco balones.
Es en la Liga donde Mejri tiene que demostrar que se merece el puesto. Esperemos que disponga de más minutos tanto en la Euroliga como en Liga.
Iris María González Serrano @irisladelmadrid
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