Partido histórico; Raúl González pide silencio.

El 13 de octubre del año 1999 se disputó un partido histórico para la afición blanca. El Real Madrid necesitaba ganar en el Camp Nou, aún sabiendo que era muy complicado ya que en Liga el conjunto blanco no ganaba desde la temporada 1983-84.

La alineación para este partido fue la siguiente; Por parte del conjunto azulgrana; Hesp; Reiziger, Abelardo, Cocu, Sergi (Puyol, min. 38), Guardiola,  Luis Enrique, Zenden, Figo (Ronald de Boer, min. 90), Kluivert y Rivaldo.  (Entrenador: Louis van Gaal)
Por otra parte el conjunto blanco apostó por esta alineación: Illgner; Michel Salgado, Iván Campo, Julio César, Karanka  (Seedorf, min. 61),  Geremi, Redondo, Raúl, Savio, Morientes (Guti, min. 72) y Anelka.  (Entrenador: John Toshack)


En el minuto 27 se adelantaron los blancos con una jugada entre Raúl y Savio, que éste último centró el balón y el siete blanco aprovechó para anotar de un cabezazo la portería que defendía el holandés Hesp. Raúl anotó el primer gol.

Sin embargo, la alegría no duró mucho porque Rivaldo empató el encuentro dos minutos después del gol del Real Madrid. Justo después del 1-1, Fernando Morientes estuvo a punto de marcar un gol que, de haberse registrado, hubiera sido recordado como un tanto antológico. El 'moro' desvió un balón de tacón y el esférico se paseó cerca de la línea de gol rozando finalmente uno de los postes. Por centímetros no llegó el 1-2.

En la segunda parte, en el minuto 49, el Fútbol Club Barcelona se puso por delante. El autor del gol fue Luis Figo que buscó el hueco y lanzó un latigazo sobre la portería de Illgner. Trallazo ajustado al palo izquierdo del meta alemán y balón adentro.

Quedaba menos para el final del partido, y el Real Madrid daba el partido por perdido. Aún así, lo intentaron hasta el final con la suerte de que en el minuto 86 el capitán Fernando Redondo cortó un balón a Zenden y se lo pasó rápidamente a Savio Bortolini. El brasileño, con dos jugadores locales acosándole, envía un pase por el medio en dirección al área, donde Raúl González, tras deshacerse de dos defensas, recoge el balón y de cuchara lo eleva por encima de la salida de Hesp para alojarlo en la red.¡Gol del Real Madrid! Empate a dos.

Seguidamente, Raúl González corrió y pidió silencio a la afición blaugrana antes de que sus compañeros felicitaran el gol con él. Fue un momento épico. El partido concluyó 2-2. Un empate que supo a victoria ya que se consiguió en los minutos finales y cuando se daba el partido por perdido.

Claudia.