viernes, 15 de septiembre de 2017

Marcelo, de dos a un partido de sanción

Aún recuerdo el primer día que mi padre me llevó al Santiago Bernabéu. Fue en un partido contra el Athletic Club de Bilbao, tercer anfiteatro o el gallinero como lo llamaban, el estadio a rebosar y el himno en los altavoces. Todavía resuena en mi cabeza aquel estribillo: "Noble y bélico adalid, caballero del honor". “Esos son los valores que transmite el equipo”, me dijo mi padre.

Fuente: Agencias


Pues bien, aunque parezca una locura lo que voy a decir, no me alegro de que le hayan rebajado un partido a Marcelo, porque, aunque sea uno de los nuestros, aunque ayer haya firmado su renovación o aunque sea el mejor lateral izquierdo del mundo, Marcelo se equivocó. Sí, se equivocó. Perdió el sentido y los valores que se supone que transmite ese escudo redondo que lleva el pecho.

¿Porque dónde está la nobleza en golpear a un contrario sin balón? ¿Dónde está el honor en golpear a un rival cuando crees que el árbitro no te ve? Porque no nos ciegue el madridismo, Marcelo golpea al jugador del Levante en la espalda sabiendo lo que hace. No podemos defender siempre a nuestros jugadores por encima de cualquier cosa, Marcelo hizo mal, se equivocó, al igual que se equivocó Cristiano aquella noche en el Camp Nou.

Me queda la alegría de poder contar con él antes de lo que pensábamos, ya que su ayuda será fundamental para el equipo. Espero que recapacite y no lo vuelva a hacer porque deja a sus compañeros vendidos. 

Está muy bien quejarnos de los árbitros cuando tenemos razón, porque como dijo en su día Álvaro Arbeloa: “Señorío no es no protestar, señorío es morir en el campo”, pero Marcelo, golpear a un rival por la espalda no es señorío.

Hugo Carbonero, @HCFanego

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